Sin ser una historia de la música Casablancas establece una especie de zoom que va de un marco general al detalle de la traducción sonora, a partir de un relato densísimo, de proporciones joycianas, sustentado en largos parágrafos de gran riqueza léxica y frases muy bien construidas.
Chiantore desenmascara expeditivamente la designación y funcionalidad de unos determinados artificios retóricos que no sobrepasan el mero intento de transcribir sensaciones pero insostenibles en un examen etimológico y musicológico.