Rumanía
Festival EnescuEl triunfo de la imaginación
Xoán M. Carreira

Jörg Widmann (Múnich, 1973), como es habitual en los creadores que desarrollaron su carrera después de la caída del Muro de Berlín, es instrumentista, director y compositor, y se prodiga en estas tres actividades con una alta competencia que pudimos disfrutar en su concierto en en Ateneo de Bucarest el pasado 28 de agosto al frente de la WDR Sinfonieorchester Köln.
En la música de Andante de la Sonata para clarinete en mi bemol mayor de que el propio Widmann interpretó con una sensibilidad tan potente que invisibilizaba su virtuosismo como clarinetista.
no se encuentran deudas con las vanguardias centroeuropeas de la Guerra Fría ni con ningún otro espejismo igualitario. Para Widmann esas vanguardias son un estilo más del pasado, con un lugar en el museo de la historia de la música del cual Widmann toma libremente ideas, procedimientos, y alusiones, al igual que hacen muchos de los compositores -y artistas plásticos, cineastas o coreógrafos- de su edad. En el caso de Widmann su amor y respeto por el pasado musical es obvio e indisimulado en las abundantes ráfagas sonoras que se interpolan en su discurso principal, a modo de interferencias que pueden llegar a adquirir la luminosidad de un neón. Y solo desde ese respeto y amor se puede realizar un arreglo - apropiación tan hermoso delSemejante intensidad interpretativa y virtuosismo ejecutivo mostró Carolin Widmann (Múnich, 1976) en el nada fácil Concierto para violín nº 2 de su hermano Jörg.
Durante décadas la WDR Sinfonieorchester Köln, y bajo la dirección de su autor se convierte en objeto de disfrute, emoción, regocijo y sorpresa para el público, o sea, lo esperable en una obra de arte actual.
Tras haber mostrado sobradamente su competencia interpretativa, la WDR Sinfonieorchester y Widmann ofrecieron una espléndida versión de la Sinfonía nº 5 en re menor op 107, 'La Reforma' de Mendelssohn, en la que Widmann acertó a destacar el decoro y la elocuencia mendelssohnianos y su profundidad afectiva desde una perspectiva que prima su carácter de 'obra actual' sobre cualquier concesión a las supersticiones historicistas.
Una bocanada de aire fresco que nos hizo revivir de la ola de calor que asola Bucarest y dificulta incluso la vida cotidiana, y que fue la causa de que muchas personas con localidad confirmada no asistieran, creando unos desagradables huecos al tiempo que las entradas figuraban como agotadas.
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