Portugal

IKFEM: un festival para una eurociudad

Xoán M. Carreira
jueves, 19 de septiembre de 2024
Marta Menezes © 2022 by Jorge Velez Marta Menezes © 2022 by Jorge Velez
Valença, viernes, 6 de septiembre de 2024. Teatro Municipal de Tui. Joly Braga Santos, Concierto para cuerdas en Re M, op.17. Fernando Lopes-Graça, Concertino para piano, cuerdas, metales y percusión. Andrés Gaos, Impresión Nocturna. Juan Crisóstomo de Arriaga, Sinfonía en Re. Marta Menezes, piano. Orquesta Sinfónica RTVE. José Luis López-Antón, director. Festival IKFEM 2024
0,0003248

La eurociudad Tui-Valença es un hermoso proyecto de convergencia europea que tras la crisis del COVID ha experimentado un crecimiento exponencial convirtiéndose en la necesaria referencia de la eurorregión galaico-minhota (que espero que en un futuro no muy lejano recupere el nombre histórico de 'bracarense'). La gestora musical y pianista Andrea González, fundadora y directora del Festival IKFEM, es una excelente relaciones públicas que desde hace una década está poniendo sus talentos al servicio del proyecto de eurociudad y con fortuna, pues ha concitado la confluencia de muy diversos estamentos políticos de los gobiernos de España y Portugal, Xunta de Galicia, Diputación de Pontevedra y el ente regional portugués, el ayuntamiento de Tui y la Cámara Municipal de Valença, a los que en 2024 se ha sumado Radiotelevisión Española (RTVE) aportando un concierto de su orquesta titular. 

El programa, diseñado para una orquesta de plantilla mediana, ofreció obras de compositores ibéricos que en este año celebran diversos aniversarios. Este programa conmemorativo afectó al equilibrio del programa, que ofrecía dos magníficas obras sinfónicas -compuestas por Juan Crisóstomo de Arriaga (1806-1826) y Fernando Lopes-Graça (1906-1994)- y dos refinadas obras para cuerdas: el Concierto para cuerdas en Re M, op.17 de Joly Braga Santos (1924-1988) y la Impresión Nocturna de Andrés Gaos (1874-1959).

Junto a Bomtempo y Viana da Motta, y probablemente por encima de estos dos, Lopes-Graça es una de las tres grandes figuras del sinfonismo portugués. Al igual que su admirado Shostakovich, su vida transcurrió en la pesadilla de una brutal dictadura que le convirtió en víctima propiciatoria. Tras su muerte, su legado literario y musical se conserva en la Casa Verdades de Faria - Museo de la Música Portuguesa, que ha producido numerosas exposiciones investigaciones y publicaciones sobre su figura, las cuales han conseguido romper el monopolio que los musicólogos estalinistas portugueses ejercían sobre su figura y memoria. Creo que este comentario es oportuno en el cincuenta aniversario de la Revolução dos Cravos, cuando sigue pareciendo dificultosa una investigación sobre el cantante José Afonso que presente una perspectiva imparcial, independiente y neutral sobre su figura pública y privada. 

El Concertino para piano, cuerdas, metales y percusión (1952/54) es una obra brillante, poderosa y vital que muestra la característica habilidad retórica de Lopes-Graça y su deslumbrante sentido de la direccionalidad. Dedicado a la gran pianista Helena Sá e Costa (1913-2006), el autor escribió para el piano una parte muy virtuosa cuyo elaborado idiomatismo se funde con una instrumentación concebida a mayor gloria de la solista, lo cual incluye algún indisimulado guiño en homenaje al Primer concierto para piano de Shostakovich. 

La recuperación de esta obra espléndida se debe en buena medida a Marta Menezes (Minde, Portugal, 1988), quien dejó bien claro que conoce al dedillo la obra, la ama sinceramente, y ha interiorizado todas y cada una de las dificultades. José Luis López-Antón (Segovia, 1990), un director bregado en la interpretación del gran repertorio sinfónico por su trabajo habitual con la madrileña Orquesta Clásica Santa Cecilia, entendió perfectamente la obra de Lopes-Graça y sacó los mejores frutos de unos ensayos estretágicamente dirigidos a obtener lo mejor de la experiencia de la Orquesta de RTVE en el gran repertorio del siglo XX. 

Más aún si cabe me agradó su interpretación de la hermosa Sinfonía en Re de Juan Crisóstomo de Arriaga, que data seguramente de 1824, por lo que está también de aniversario aunque el programa de mano del concierto no lo indicara. Alejándose de la corriente principal de las tradiciones interpretativas de esta Sinfonía, que insisten en su etiología vinculada al estilo heroico beethoveniano, López-Antón la entiende como una obra próxima a la sensibilidad Biedermeier. De este manera escuchamos un discurso sentimental en el que las emociones priman sobre las preocupaciones formales. También acierta López-Antón al dar protagonismo al canto de las maderas, que son acompañadas por las cuerdas conforme a la práctica habitual de las Sinfonías de Méhul y las Oberturas de Boieldieu, la música con mayor valor simbólico en el París de Arriaga. Los ensayos requirieron -evidentemente- que la ORTVE trabajara la obra con criterios distintos a los habituales aunque la respuesta fue satisfactoria y se benefició de la grata acústica del Teatro Municipal de Tui. 

El Concierto para cuerdas en Re M, op.17 (1951) de Joly Braga Santos es una obra delicada y exquisita concebida conscientemente siguiendo los procedimientos de Gian Francesco Malipiero (1882-1973). Braga Santos era un compositor culto, elegante, empático y refinado que poseía un agudo sentido de la ironía. Es una figura semejante a la de Montsalvatge con quien tenía buena relación y compartía su moderado entusiasmo por la 'gran música alemana': era un cosmopolita meridional que amaba la música italiana y admiraba la música francesa. Un intérprete que no tenga estas referencias podrá ir poco más allá de una correcta ejecución de la música de Braga Santos. Este fue el caso de López-Antón, quien además tuvo que trabajar con las cuerdas de la ORTVE al desnudo: la orquesta está recuperándose admirablemente de la penosa situación a la que le llevó una mala dirección artística y la desidia de sus administradores, pero siguen existiendo secuelas de la enfermedad y en la ejecución del Concierto para cuerdas en Re M el aire no corría en la trama sonora y el refinamiento del compositor pasó casi inadvertido. 

Andrés Gaos, de quien pocos se están acordando en el 150 aniversario de su nacimiento, parecía una guinda para completar el pastel del concierto. Profesor de violín en Buenos Aires, la Xunta de Galicia tiende a presentarlo como un gran concertista internacional y una figura de la composición, lo cual es rotundamente falso. Pero su Impresión nocturna (1937) es una obra ciertamente afortunada que parodió con éxito los estilemas de moda en los años 1930. Tal como la concibió y estrenó Gaos en París es una pièce charmante y de grata escucha, que al lado de las otras obras del programa pareció irrelevante y casi prescindible, especialmente en la versión arreglada por Joám Trillo en 1992 que se utilizó en el concierto. Su arreglo modifica la textura armónica, interpola materiales de cosecha propia y el resultado tiende a la aridez. Un músico bien formado como López-Antón detectó sin duda las incoherencias del arreglo pero no las supo resolver, lo cual sumado a las citadas secuelas de las cuerdas de la ORTVE llevaron a una ejecución irrelevante. 

Dos horas antes del concierto se celebró en la Pousada de Valença se celebró un acto institucional que sirvió tanto de clausura de la presente edición del IKFEM como de muestra de las perspectivas de los diferentes entes políticos sobre el presente y futuro de la eurorregión y la eurociudad. El discurso del representante del Ministerio de Asuntos Exteriores español mostró especial clarividencia, al igual que el alcalde del pequeño municipio de A Guarda que aspira a integrarse en la eurociudad. Todos los intervinientes mantuvieron el decoro y dijeron cosas oportunas, si bien yo eché en falta más menciones a Europa como proyecto común. Tras el acto político se sirvió un cóctel amenizado por un modesto tablado flamenco: a pesar de mi conocido amor por el flamenco creo que no era el lugar ni el momento. En el momento de la exaltación del proyecto de eurorregión hubiera sido más oportuno un breve recital de música de la eurociudad: Tui tiene una tradición musical bien conocida pero poco difundida de música para guitarra o tecla, con obras de una calidad artística muy superior a la mostrada por Marcos de Silvia en trío. 

Comentarios
Para escribir un comentario debes identificarte o registrarte.