Alemania
The Times Are Racing. Debut hamburgués de Demis Volpi
Juan Carlos Tellechea
Demis Volpi,
novel intendente (director general) del Ballet de Hamburgo, fue recibido este
sábado con un apoteósico alud de ovaciones y frenéticas exclamaciones de
aceptación por el público, que colmaba hasta el techo la gran sala de la Ópera
Estatal de esta ciudad, en su primera velada de danza titulada The Times Are
Racing (Los tiempos que corren), para abrir la temporada 2024/2025. Volpi
sucede en el cargo al legendario coreógrafo John Neumeier, quien sigue
teniendo a su cargo la Escuela de ballet de Hamburgo que él mismo creara en
1978.
Medio siglo de danza con una amplia diversidad
de estilos, temática, historias y gestualidad fueron reunidos en esta
maravillosa tarde por Volpi con una obra propia (The thing with feathers*) y
sendas piezas de Pina Bausch,
pionera del teatro-danza (Adagio*); Hans van Manen (Variations
for Two Couples*); y Justin Peck
(The Times Are Racing*). , y representantes de la Fundación Pina Bausch, además de ,
estuvieron presentes en este estreno.
Sin exageraciones los espectadores (de todas
las edades) quedaron tan fascinados por la fresca brisa que ingresaba a la
sala, el extraordinario programa, la forma de ponerlo en escena y la música
elegida, así como por el dinamismo y la belleza de las interpretaciones, que
aclamaron al final durante largos y más largos minutos a todo el elenco sin
excepciones.
La orquesta
La Philharmonisches Staatsorchester Hamburg,
bajo la égida de Vitali
Alekseenok, ofreció una brillante y equilibrada ejecución de los
fragmentos musicales seleccionados para esta velada de ballet: Gustav Mahler (Adagio,
primer movimiento, Andante-Adagio, de la Sinfonía nº 10 en fa sostenido mayor,
inacabada); Benjamin
Britten (segundo movimiento del Cuarteto de cuerda en fa mayor); Richard Strauss
(Metamorfosis para 23 solistas de cuerda); Astor Piazzolla (Melodía
en la menor, Canto de Octubre); Einojuhani
Rautavara (“Kopsin Jonas”, de The Fiddlers); y Stevan Kovacs Tickmayer (Lasset uns den
nicht zerteilen, No nos dejemos dividir, según Johann
Sebastian Bach).
Teatro-danza
La coreografía de Adagio, de los tiempos en
que Pina Bausch fundaba su compañía Tanztheater Wuppertal y ella misma bailaba,
allá por 1973-1974, es una reconstrucción realizada este año por la Pina Bausch
Foundation y el Ballet de Hamburgo. John
La coreografía de Pina Bausch, estrenada en
1974 nunca más fue representada desde entonces hasta hoy. Danzada sin
zapatillas de ballet, con los pies directamente sobre el suelo, la obra cobra
en su evolución un dramatismo y una riqueza de expresión cautivantes con este
refinado reparto de sobresalientes bailarinas y extraordinarios bailarines de
la compañía.
Con su estilizada figura, la joven bailarina Olivia
Betteridge parece dar nueva vida a Pina Bausch, tal como la
coreógrafa aparecía siempre en escena, ataviada con un cómodo vestido oscuro,
que apenas cubría sus pantorrillas, y su cabello recogido hacia atrás,
enroscado en un rodete o moño.
Lenguaje
Las Variaciones para dos parejas de Hans van
Manen exploró las relaciones humanas con elegancia, sutilidad y bello sentido
irónico. El coreógrafo hizo palpable lo invisible en esos contactos entre los
individuos, en lo que comúnmente se denomina atracción, energía o simplemente
vínculos interpersonales.
En sus ballets van Manen da a las bailarinas la
misma fortaleza que poseen los bailarines, cambiando así las reglas y la
profunda química de la danza, si bien permanece fiel a su lenguaje materno
original.
Coreografiada con composiciones totalmente
opuestas, desde Britten hasta Piazzolla, muestra lo desigual en lo que aparenta
ser similar. Al principio, las dos parejas parecen idénticas, con sus
atractivos y uniformes leotardos (vestuario y escenógrafía Keso Dekker). Pero
cuanto más tiempo bailan Madoka Sugai
- Alexandr
Trusch e Ida
Praetorius – Matias
Oberlin más claramente emergen sus personalidades.
A menudo es solo un gesto, una mirada, la
posición de la cabeza lo que revela algo sobre la idiosincracia de los
intérpretes. Una posición en el espacio que, pese a la abstracción, dice mucho
sobre las relaciones tácitas entre los cuatro. Solo hay que fijarse bien en
ellos y en sus movimientos. La forma en que van Manen coreografía, de forma
directa, con una sensualidad no disimulada y no exenta de humor, enseña al
espectador lo placentero que puede resultar el disfrute del voyerismo. Todo
concluye con la exquisita interpretación de la Melodía en la menor de
Demis Volpi
La coreografía The thing with feathers de
Demis Volpi, que éste estrenara el 29 de abril de 2023, cuando todavía era
director general del Ballett am Rhein/Düsseldorf-Duisburgo, fue ampliada y
remozada expresamente para esta velada. Es la primera pieza que Volpi elaboró
en su carrera con música del Romanticismo tardío (Richard Strauss) con el
propósito de explorar temas como la nada y el vacío en esa nube sonora, según
explica el nuevo intendente del Ballett Hamburg en el prefacio del programa de
mano de esta velada.
Volpi relata que cuando introducía
individualmente a cada bailarina o bailarín en ese espacio acústico descubrió
-de forma inesperada y positivamente sorprendente- la esperanza, ese estado de
ánimo que surge cuando se presenta como alcanzable lo que se desea; algo que la
poetisa estadounidense Emily
Dickinson describía tan acertadamente como this thing with feathers (esa cosa con plumas), en su apasionada obra lírica.
Los bailarines emergen al principio
repetidamente de un fondo sombrío en el que desaparecen de vez en cuando, como
si quisieran encontrar su lugar en el flujo del tiempo. Al fondo del escenario
desciende lentamente una pantalla de proyección con un paisaje marino bajo un
cielo cubierto de gris plomo, sobre el que destacan desafiantes los fuertes
bailes en solitario de Jack Bruce
y Alessandro
Frola.
Justin Peck
La embriagante coreografía final, The Times
Are Racing, de Justin Peck, que prestó su título a esta cita balletística,
causó un terremoto de aplausos, vivas y todo género de expresiones de
aprobación en la sala. La pieza desafía los límites tradicionales del ballet,
si bien sus movimientos, giros, arabescos, saltos, piruetas y manifestaciones
corporales son sencillos. Los bailarines, vestidos con jeans, camisetas
comunes y corrientes, y zapatillas deportivas, muy al estilo estadounidense, despiertan
sentimientos de libertad e informalidad exuberantes. Un dúo de bailarines
zapatea al estilo del claqué de Lloyd Riggins, una
variante que John Neumeier integrara asimismo en algunos de sus ballets.
El vocabulario dancístico es fácilmente
reconocible, pero lo que maravilla es el tempo de la interpretación con una
música asombrosamente vertiginosa. No siempre los movimientos van emparejados
uno a uno con el ritmo y los compases de las composiciones de Dan Deacon (“USA I-IV” del
álbum America), grabadas y reproducidas digitalmente.
Hay pasajes muy sincopados que los intérpretes
bailan, sin embargo, con serenidad y desenfado, aunque el espectador recibe la
impresión de que sobre el escenario tienen lugar movimientos sísmicos
incontrolados e incontrolables. Ni más ni menos que una expresión del tiempo
desenfrenado que le toca vivir ahora a la humanidad, plena de trepidantes
cambios y riesgos.
Memorable
La conformación misma de la velada con estas
cuatro breves obras es de por sí también una interesante narración; un periplo
que va desde la introspección hasta la expresión exterior, desde la profundidad
abisal a lo lúdico. Si bien estas piezas son relativamente breves forman todas
juntas un amplio arco de enunciados de enorme peso. A través de la
confrontación de diversos estilos e historias se establece un diálogo entre las
obras que invita asimismo a encontrar vínculos y contrastes, así como a
contemplar cada pieza no de forma aislada, sino como parte de un todo más vasto
y reflexivo.
La función de ballet presentada por Demis Volpi
en la Ópera Estatal de Hamburgo no solo acrecentó la comprensión de lo que la
danza puede alcanzar por sí misma, sino que se convirtió en un precioso sarao
de diferentes formas de expresión y una muestra de la fuerza que posee este
género para transmitir complejos relatos y fuertes emociones. Una eclosión de
aclamaciones, altisonantes vivas y estridentes silbidos de aprobación cerraron
por último esta hermosa y memorable tarde otoñal.
Notas
1. “The thing with feathers”. Coreografía y escenografía Demis Volpi Música Richard Strauss, Metamorfosis para 23 solistas. Vestuario Thomas Lempertz. Iluminación Volker Weinhart. Dramaturgia Julia Schinke Estreno en el Ballett am Rhein (Ópera de Düsseldorf), el 29 de abril de 2023. Intérpretes: Jack Bruce Alessandro Frola Silvia Azzoni, Paula Iniesta, Futaba Ishizaki, Almudena Izquierdo, Ana Laudere, Xue Lin, Emilie Mazon, Jacopo Bellusi, Aleix Martínez, Florian Pohl, Alexandre Riabko.
2. “Adagio”. Coreografía Pina Bausch. Música Gustav Mahler, Adagio de la Sinfonía nº 10. Escenografía y vestuario Karl Kneidl. Iluminación Benjamin Schälike. Preparación Josephine Ann Endicott, Breanna O'Mara, Scott Jennings. Estrenada por el Tanztheater Wuppertal Pina Bausch, el 8 de diciembre de 1974. Una reconstrucción de la Pina Bausch Foundation con el Hamburg Ballett 2024. Intérpretes: Gabriel Barbosa, Jacopo Bellussi, Olivia Betteridge, Lormaigne Bockmühl, Daniele Bonelli, Eleanor Broughton, Justine Cramer, Lennard Giesenberg, Charlotte Kragh, Charlotte Larzelere, Evan L'Hirondelle, Emilie Mazon, Javier Monreal, Louis Musin, Artem Prokopchuk, Caspar Sasse, Madeleine Skippen, Ida Stempelmann, Hermine Sutra Fourcade, Emiliano Torres, Ana Torrequebrada, Lin Zhang.
3. “Variations for Two Couples”. Coreografía Hans van Manen. Música Benjamin Britten: Cuarteto de cuerda en fa mayor, segundo movimiento. Einojuhani Rautavara: “Kosin Jonas” de “Pelimannit” (“The Fiddlers”), Opus 1. Stevan Kovacs Tickmayer: “Lasset uns den nicht zerteilen” (No nos dejemos dividir), según Johann Sebastian Bach. Astor Piazzolla: Melodía en la menor (Canto de Octubre), transcripción para violín y orquesta de cuerda de Bob Zimmerman. Escenografía y vestuario Keso Dekker. Iluminación Bert Dalhuysen. Preparación Rachel Beaujean, Jozef Varga. Estreno del Ballet Nacional Neerlandés el 15 de febrero de 2012. Intérpretes: Madoka Sugai – Alexandr Trusch Ida Praetorius – Matias Oberlin.
4. “The Times Are Racing”. Coreografía Justin Peck. Música Dan Deacon, USA I-IV del álbum “America”. Vestuario Humberto Leon. Iluminación Brandon Stirling Baker. Preparación Craig Salstein. Estreno New York City Ballet, el 26 de enero de 2017. “The Times Are Racing” es una obra comisionada por el New York City Ballet. Intérpretes: Futaba Ishizaki Matias Oberlin Louis Musin Caspar Sasse Paula Iniesta, Anna Laudere, Madoka Sugai, Christopher Evans Francesca Harvey, Greta Jörgens, Hayley Page, Madeleine Skippen, Ida Stempelmann, Ana Torrequebrada Joaquin Angelucci, Francesco Cortese, Bruno Garibaldi, Pepijn Gelderman, Moisés Romero, João Santana. Sonido Dan Deacon: USA I-IV del álbum “America”, P+C 2012 Domino Recording Co. Ltd.; DNO319
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