Recensiones bibliográficas
Novedades bibliográficasEscenarios en la historia
Gustavo Gabriel Otero

El segundo título de una nueva editorial independiente que surgió para
cubrir un vacío como lo es la escritura acerca de la música clásica, la ópera y
la danza, no puede menos que celebrarse. Ediciones Ciudad de las Artes, que nació
al amparo de la Fundación Cantabile para las Artes, inició su actividad con Entre
las notas, de Fernando Inicio y desarrollo de la ópera en el Buenos Aires del ochocientos,* de Claudio ; una obra que
viene a llenar un débito importante en el estudio del nacimiento y primer
desarrollo de las representaciones operísticas en Buenos Aires.
La publicación del libro forma parte de un convenio realizado entre
Ediciones Ciudad de las Artes y el Departamento de Artes Musicales de la
Universidad Nacional de las Artes, y cuenta con el acompañamiento de Fundación
Santander Argentina a través del Régimen de Promoción Cultural (Mecenazgo) del
Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires.
En otras ocasiones ya nos hemos referido a la poca atención que los
musicólogos locales le han prestado y le prestan a la ópera. Esta vacante fue
llenada por profesionales de otras disciplinas como el arquitecto Néstor
Sin dudas en vísperas del bicentenario de la primera representación de una
ópera completa en la Argentina -El barbero de Sevilla, 27 de septiembre
de 1825- contar con un libro que describa la evolución del arte lírico en la
Buenos Aires del siglo XIX e inicios del XX resulta indispensable. No se trata
de una cronología detallada función por función atento a que el fallecimiento
de César Dillon y la llorada dispersión y pérdida de sus materiales hacen
imposible intentar esta reconstrucción. Ratier opta por un ensayo histórico,
político y social sobre los inicios y evolución de la ópera en Buenos Aires
centrando cada capítulo en un teatro ya desaparecido. Así el Coliseo Argentino
se desarrolla en el primer capítulo a los que le siguen el Teatro de la
Victoria, el primer Teatro Colón, el Teatro de la Ópera y el Politeama
Argentino.
Luego de una mirada hacia la Buenos Aires virreinal que contextualiza el
inicio del teatro en nuestro medio, las páginas recorren los gobiernos de
Martín Rodríguez y Bernardino Rivadavia en dónde se inician las
representaciones de óperas completas (quizás es un poco fuerte a doscientos
años de los hechos calificar a Bernardino Rivadavia de ‘rastacueros’ pero allí
surge el Ratier polemista que hace más interesante sus escritos).
De allí se pasa a los años finales de Juan Manuel de Rosas (gobierno tratado
con cierta benevolencia), la consolidación del Estado Nacional y la influencia
de la llamada la Generación del 80 (muy criticada en varios aspectos por el
autor), que conlleva al arribo de las grandes corrientes inmigratorias,
principalmente italianas y las tensiones que ello trajo.
No falta la indispensable mención a la arquitectura de los teatros, a las obras y el repertorio, a los artistas; los compositores y hasta del público, ocasionalmente Ratier utiliza el aporte de testimonios directos y hay un largo e interesante apartado con la recepción de las óperas de Wagner en la ciudad (primero en italiano y luego en su idioma original), y es importante destacar que cada capítulo se cierra con la cronología de estrenos locales en casa sala.
En el Coliseo Argentino va desde 1825 (El barbero de Sevilla) a 1855 con
la versión en italiano de La favorita de Donizetti; en el Teatro de la
Victoria desde 1848 con Lucia de Lammermoor hasta la obra fundante de
las óperas de autor argentino, La gatta bianca de Francisco
El autor toma partido en las páginas del libro y así contextualiza la
historia política y social desde una mirada que se emparienta con el
nacionalismo católico antiliberal de los primeros años del siglo XX que luego
confluyó, desde 1943, en el movimiento fundado por el coronel Juan Domingo
Fundamentalmente el libro es la descripción de un nacimiento, un desarrollo
y un ocaso de esas antiguas salas de ópera, hasta arribar al momento en que el
actual Teatro Colón pasa a ser centro y único escenario de la actividad lírica
de la ciudad de Buenos Aires.
Con todo Claudio Ratier deja en el lector una serie de reflexiones que polémicas
o no, nunca dejan indiferente. Por ello y por llenar un vacío bibliográfico es
una obra más que bienvenida.
El volumen se consultó por
gentileza de Fundación Cantábile para las Artes.
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