Suiza

Lucerna: el universo de ‘Le piano symphonique’ (I/III): De Bach a Brecht

Agustín Blanco Bazán
viernes, 24 de enero de 2025
Fazil Say © 2020 by Marco Borggreve Fazil Say © 2020 by Marco Borggreve
Lucerna, lunes, 13 de enero de 2025. Konzert Saal del Centro Cultural de Lucerna (KKL). Fazil Say, pianista. J. S. Bach, Variaciones Goldberg, Aria con 30 variaciones. W. A. Mozart, Sonata nº 11 Alla turca. HK Gruber, Chansonier, Kirill Gerstein, piano. Berlin im Licht. Lieder de Hanns Eisler y Kurt Weill. Festival Le piano symphonique 2025
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La sola lectura de la ficha técnica permite apreciar la variedad de artistas y selección de repertorio que caracteriza Le Piano Symphonique, el intenso festival invernal de música que Lucerna viene alojando ya en su cuarto año consecutivo. La propuesta guía de este importante acontecimiento de una semana de duración es mostrar al piano en un contexto que, a más de recitales solistas, lo pongan al centro de experiencias sinfónicas y camerísticas rebosantes de diversidad. ¿Y qué mejor ejemplo de ello la noche inaugural de este año?

De Bach a Brecht

El pianista y compositor turco Fazil Say abrió esta primera velada con una interpretación de las Variaciones Goldberg talentosa por su espontaneidad y precisión. Confieso que me resulta casi imposible reseñar una obra que, como ésta, excede mi capacidad crítica. Siempre que la escucho me abandono a cada variación sin poder juzgar al intérprete, porque si éste es talentoso, uno simplemente se olvida de él y todo va bien. Sólo si el pianista trata de interferir entre Bach y el oyente es posible advertir alguna negatividad. Por ello me restrinjo aquí a señalar que Say nunca se precipitó a vertiginosidades o acentuaciones seudo-virtuosísticas. Simplemente ocupó el segundo plano que frente a Bach corresponde a cualquiera de sus intérpretes con una lectura clara, sensible y espontánea.

Sin retirarse de la escena, el pianista solo aceptó un corto aplauso antes de volver a su taburete para seguir la última variación bachiana con las variaciones iniciales de la Sonata nº 11 de Mozart, durante la cual sí que añadió toques personales como rallentandos y aceleraciones a veces demasiado idiosincráticas por su marcado en forte. La famosa Marcha turca coronó el final con una velocidad casi como para acortar el hipo, antes de desaparecer en una milagrosamente clara diminución de dinámicas en la coda.

En la segunda parte de este primer recital, el enfático pianista Kirill Gerstein acompañó al legendario chansonnier HK Gruber en Berlin im Licht, un recital de canciones de Kurt Weill y Hans Eisler en el cual el extremadamente sarcástico humor de la República de Weimar resonó con típica agresividad de protesta en la enorme y refinada sala de conciertos del centro cultural de Lucerna. Pero resonó defectuosamente, porque la voz ajadamente intensa y seca que Gruber proyectó a través de un micrófono sufrió de reverberaciones y ecos inevitables en una sala no apropiada para experimentos de cabaret.

Para más, el programa fue excesivo por la cantidad de canciones (veinte en total), la longitud de algunas de ellas, y la actitud de Gruber de cambiar el orden anunciado mientras pasaba a la sans façon las partituras entre dos taburetes. A mediados del programa algunos espectadores comenzaron a retirarse mientras que los que quedaban pretendían compensar estas defecciones con un fervor proselitista, porque ... ¿qué mejor protesta que cantar el lied de los banqueros de Brecht en la meca mundial de los bancos?

Mi impresión en cambio fue que todos, banqueros o no, habrían disfrutado de este recital en un ambiente mas íntimo y con un programa más coherente y sintético. Porque no todo el mundo en esta ordenadísima y próspera ciudad suiza puede asociarse con los sablazos anarquistas berlineses sin una buena explicación de la narrativa general. De cualquier manera, ¡qué salero el de las protestas de Gruber, siempre tan maravillosamente moduladas en todas sus posibilidades cacofónicas! ¡Y qué talento, el puesto por Gerstein, por ejemplo en la improvisación de un magnífico postludio para la Canción de los marineros!

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