Esta producción de Alcina, una de las más sutiles de Richard Jones que recuerdo haber visto, sugiere una lucha entre puritanos al estilo de los amish y la hechicera que ha irrumpido en su comunidad para transformarla en una isla de placeres donde subyuga amantes que después convierte en animales.
Uno de los principales atractivos de esta Tosca era la producción de Christof Loy quien, sin caer en innovaciones estúpidas o ilógicas, planteó una versión clásica pero al mismo tiempo dotada de un aire poético, muy centrada en la propia figura de Tosca.
“¡Es que Mahler hoy estaba sonriendo!”, respondió Bernstein.También pareció sonreír en esta oportunidad, al menos para aliviar al público de un país finalmente derrotado por la desesperanza y la arrogancia xenófoba de su elite gobernante.
A partir del tercer acto, esta partitura admirable fue apoderándose de todos los artistas para concentrarlos hacia su irresistible desenlace dramático.Edusei se comportó más sutilmente y el cuarteto final de la escena de la 'Barrière d´Enfer' fue iniciado por un calmo pero implacable “Donde lieta usci” a cargo de una Mimi que Pérez supo hacer crecer dramáticamente en forma admirable
El final de 'Mayerling', repitiendo exactamente la escena inicial, pero ahora comprensible tras habernos desvelado toda la historia a lo largo de las casi tres horas que dura la representación, es muy efectivo y cerró gloriosamente un ballet fascinante
La London Sinfonietta interpretó un programa en cierta medida autobiográfico, ya que inició el concierto con O-mega, una de las últimas composiciones estrenadas por Xenakis, quien la escribió precisamente para que la estrenaran en el Festival de Huddersfield de 1997;
Una de las producciones escénicas más logradas de Aida, una ópera reconocidamente difícil de presentar a públicos contemporáneos, y como ocurre de costumbre con Carsen, la sincronización entre la música y la acción escénica es impecable.
Frente a este Goliat, lo más que puede esperarse de un director de orquesta es un David capaz de controlar las dinámicas para que el ejército de instrumentistas de exprese como pueda, pero claro está que los directores de orquesta talentosos pueden hacer algo más.
Rustioni impuso una vena lírica donde los 'cantabile' parecieron tomar la delantera apoyados en marcados firmes, pero nunca exagerados, ni siquiera en la escena de conjunto del final del acto tercero