Los Nocturnos de Fauré ya no rinden homenaje a la noche romántica o al Bel canto de Bellini.Estas piezas líricas evocan la comunión secreta entre el Hombre y las cosas invisibles.
Gottlieb Wallisch ofrece interpretaciones sacadas de la pasión de su corazón.La acertada elección de las obras y su secuenciación se corresponden con la autenticidad e intensidad de su ejecución.
Cantada exclusivamente por mujeres, 'Venus y Adonis' mezcla el estilo italiano y los giros tradicionales españoles con numerosos préstamos de la Zarzuela de Corte.El álbum sale a la venta el viernes 17 de enero de 2025.
Las interpretaciones de Margarita Höhenrieder y de Antti Siirala destacan sobremanera por su preocupación por la autenticidad, ofreciendo soberanos contrastes y un fino dominio del lenguaje específico del compositor noruego.
La capacidad de tocar varias melodías al mismo tiempo, tañer polifonía, es la llave que le dio al laúd y a la vihuela la capacidad de interpretar las grandes obras de los maestros del contrapunto y acceder a la música seria.
El disco, una joya que merece ser atesorada, comienza con la interpretación de ocho bellas obras menos tocadas o casi desconocidas de Fauré antes de concluir con el 'Réquiem', que ha seducido a varias generaciones de amantes de la buena música.
El objetivo de Palimpsests era lograr algo parecido al atardecer o al amanecer en el desierto, o a gran altitud en invierno, cuando el sol está muy bajo y la luz casi horizontal y cristalina.
La sección de cuerdas de la orquesta es la verdadera protagonista en la Suite Japonesa, consiguiendo altas cotas de sutileza y una afinación perfecta especialmente en el segundo movimiento titulado Tanabata.
En Erinnerung casi se puede oir la instrumentación de una gran orquesta;las arpas en la sección central, seguidas por las trompas, trompetas y trombones.Tras un gran crescendo la música se esfuma como por arte de magia y solo queda la imagen de un bello sueño.
El oyente encontrará aquí una sonoridad muy buscada -en la que se explora y extrae con maestría las posibilidades tímbricas del instrumento-, un exquisito cuidado en los cambios de dinámica y, como ya se ha subrayado, especialmente en esos fortes atacados en las tesituras más graves.