Loy ha querido borrar el elemento natural a toda costa;pero parece que el libreto se acaba volviendo inevitablemente en contra de su propio konzept, por más que su punto de salida fuese, como mínimo, interesante.
Desde que vi el anuncio de la temporada me pregunté por qué otra vez esta ópera a escasos tres años de su última representación, también con una producción prestada, con el mismo director y una de las cantantes en un rol distinto, y otra en el mismo que ya había cantado hace tiempo.
De la regie de Christof Loy merecen destacarse un movimiento de personas en los cuales las miradas, ya sea cómplices o temerosas, de los diferentes personajes acompañaron un movimiento escénico que transformó en secundarios los disfraces de Ferrando y Guglielmo, porque su colorido vestuario, contrastante con el riguroso negro de los demás, nunca podían hacerlos irreconocibles.
Se presenta la Temporada 2020-2021 del Teatro Real, reivindicando la paulatina vuelta a la normalidad y la confianza en el futuro.Serán quince óperas, de las cuales siete son nuevas producciones del Teatro Real y dos son estrenos absolutos.
El director de orquesta Baldo Podić (Duvrovnik, 1942;Lugano, 2020) falleció el pasado 20 de abril en Lugano.Podić trabajó en el Stadttheater Basel y en la Deutsche Oper am Rhein, entre otros muchos teatros
A lo que invita por encima de todo esta propuesta escénica de Loy, una delicatessen apta para los paladares más exquisitos, es a dejarse llevar, tanto por la dialéctica de las palabras como por el vuelo de la música más sincera concebida por Strauss, en unos tiempos convulsos, el año 1942, en que 'Capriccio' vio su estreno en el castigado Munich.
La soprano eslovaca Edita Gruberova (Bratislava, 1946) ha anunciado que abandona su carrera operística en escena, aunque seguirá participando en recitales, clases magistrales, etc.Su última aparición en escena será en la Bayerische Staatsoper de Múnich el próximo miércoles 27 de marzo, interpretando a la reina Elisabetta en el Roberto Devereux de Gaetano Donizetti (producción de Christof Loy).
Loy colaboró con Antonio Pappano, para presentarnos una Forza de excepcional unidad dramática y musical.Siguiendo una propuesta de sólida tradición en materia teatral, el regisseur mantuvo la mesa del comedor como centro épico de los dos primeros actos y fiel a los cánones del Musiktheater alemán, no dejó un solo compás sin movimiento acorde con la música y el texto.
La relación de Gruberova con la Bayerische Staatsoper fue bonita mientras duró, pero creo adecuado que éstas funciones sean su despedida.Fue otrora maravillosa, pero su propia concepción del mito ha hecho que se le nuble el entendimiento y se niegue a escucharse, a afrontar la realidad, que pese a que nos pese y a los brava !!
Elza van den Heever hace volar sillas, se sube a la mesa y ataca con los puños crispados al sinvergüenza de Pollione con un realismo que hace saltar a los espectadores del apoltronamiento en sus butacas.