Realmente lamentaré no volver a ver a Gergiev, pero creo que estas terribles decisiones alguna explicación o justificación tienen.Al menos él ha sido digno y coherente y no ha abierto la boca.También ha sido el más perjudicado.
ÓPERA XXI reúne a los 25 teatros, temporadas y festivales de ópera estables españoles y, de forma honorífica, al Teatro Colón de Buenos Aires y al Teatro San Carlos de Lisboa.
Grigorian es Grigorian y difícil no lagrimear frente a su mezcla de ansiedad y premonición con que canta su plegaria por su bebé que, ignora, está siendo asesinado mientras ella reza por su vida y su seguridad.
Enseguida todo comienza a desmoronarse por una razón muy simple: el Holandés de Wagner es una figura intemporal a la cual es imposible asignarle una prontuario histórico sin destruir el núcleo dramático.
En España hay que ser un auténtico malabarista para que te acepten la derecha y la izquierda.Pero más allá de la habilidad y la paciencia, es casi un milagro considerarse independiente, que no es lo mismo que ser neutral.
Loy ha querido borrar el elemento natural a toda costa;pero parece que el libreto se acaba volviendo inevitablemente en contra de su propio konzept, por más que su punto de salida fuese, como mínimo, interesante.
Una característica fundamental de esta regie es la humanidad de estas tres mujeres y la naturalidad de su movimiento.Gente como ellas vemos todos los días en todos lados.Y sus desesperaciones son domésticas, y nunca realzadas con gestos histriónicos
Se presenta la Temporada 2020-2021 del Teatro Real, reivindicando la paulatina vuelta a la normalidad y la confianza en el futuro.Serán quince óperas, de las cuales siete son nuevas producciones del Teatro Real y dos son estrenos absolutos.
Ha habido quien ha fruncido el ceño ante música tan ‘decadente’, y para colmo de un compositor que acabaría su carrera como autor de bandas sonoras del cine de Hollywood… Como si esto último fuera un crimen o una prostitución, y como si Korngold, u otros como él, hubieran tenido alguna posibilidad de elección si querían seguir vivos y de algún modo en la profesión para la que estaban dotados.
Curiosa combinación la de unir en una misma representación dos obras aparentemente tan distintas como Oedipus Rex y Iolanta.En la presentación de esta producción, la directora de escena, Lydia Steier, lo explicaba como: "Dos óperas, dos personas que rehúsan aceptar su destino: un rey que, en momentos de crisis, debe afrontar el hecho de que ha sido ciego ante la verdad durante muchos años [...] y la hija ciega del rey quien, por orden de su padre, ignora su discapacidad, pero adquiere conocimiento y finalmente es capaz de ver".