Presenta una programación marcada por la pluralidad que incluye 156 conciertos con grandes nombres del panorama internacional y jóvenes promesas locales.
La presencia del director Riccardo Chailly, al frente de la Orquesta de la Scala de Milán, marca el ciclo del Auditorio Kursaal, por el que pasarán músicos de gran calado que abordarán obras del gran repertorio.
Si se compara la interpretación de Chopin de Lisiecki con la de exégetas tan consagrados y reconocidos como Grigory Sokolov o Daniil Trifonov, el joven Lisiecki está lógicamente muy lejos de su nivel
Como aquellos rayos dorados del sol iluminaron el Auditorio Nacional antes del recital, Sokolov brindó paz y tranquilidad, purificando el alma e iluminando el interior de cada oyente con su arte, dejándonos a todos con muchas ganas de volver a escucharle en directo.
En 2024, numerosos artistas de todo el mundo acudirán de nuevo a la Cuenca del Ruhr con una cosa en común: La firme convicción de que el poder unificador y pacificador de la música será más poderoso a largo plazo que todas las guerras y conflictos del mundo.
Uchida y Biss, aunque no sean un dúo estable de piano, han ensayado -y mucho- juntos, y además tienen un entendimiento natural evidente: los fraseos y las dinámicas fueron casi perfectos
Hay otro aspecto que me apetece destacar de Sokolov y es el rígido entrenamiento de sus dedos, cada uno de los cuales es como un buen soldadito desfilando, excepto que el resultado se parece más a un ballet.
El sonido de Sokolov es extremadamente limpio.Un encuentro con un sonido como llegado de otro tiempo que se impone y se hace diálogo íntimo, rostro contra rostro, incluso en un espacio tan grande como Kursaal.