El ciclo ha acogido 8 grandes conciertos de formaciones de primer nivel internacional en el Palau de la Música y 4 conciertos de pequeño formato de intérpretes nacionales.
En 2024, numerosos artistas de todo el mundo acudirán de nuevo a la Cuenca del Ruhr con una cosa en común: La firme convicción de que el poder unificador y pacificador de la música será más poderoso a largo plazo que todas las guerras y conflictos del mundo.
Petrushka es una obra fundamental, de ruptura y de opción radical sobre el futuro.Edward Gardner subraya hasta qué punto el trazo es limpio, centrado en el timbre, casi dando la espalda a la melodía en beneficio del ritmo.
Los grandes nombres de la dirección, la escenografía, el canto y el baile conforman un panorama en el que se combina la tradición con las nuevas propuestas.
Grimaud lleva décadas firmemente establecida en el mundo de los conciertos y sus actuaciones, que son siempre una garantía de calidad, se caracterizan por la contención y la modestia.
La música de Grimaud es técnicamente sólida y expresiva, sensual y reflexiva, pero nunca abandona la zona de confort emocional.Trabaja incansablemente con los pedales.Como si no le bastara con la reverberación de esta gran sala auditorio.
Empezó imitando a Glenn Gould y acabó dando la vuelta al mundo en Instagram.Después de aquel reel viral con medio millón de visualizaciones, ya ha imitado a 29 pianistas diferentes.
Manfred Honeck le ha hecho mucho bien a la Pittsburgh Symphony Orchestra, su época que arrancó con su clamoroso debut en 2006 y su primer nombramiento en 2007 (como director principal desde la temporada 2008/2009), hará historia.