El amor puede hacernos transitar por senderos tanto paradisiacos como obscenos, y eso intenta plasmar Andrews, subrayando la función de “dramma giocoso” de Da Ponte, quizás con algunos elementos innecesarios
El resultado es una representación incoherente, del todo incomprensible para quien no conozca muy bien la obra en su forma genuina.'El caballero de la rosa' queda degradado a pasatiempo para un público que, entendiéndolo o no, se conforma con lo que le den
Plácido Domingo ya no es un cantante, es una institución venerable y admirada.Su presencia escénica es igual de convincente que en el pasado.Como una noche con la luna asomando fugazmente entre las nubes, su voz se ilumina de vez en cuando con destellos de un viejo esplendor.
En Dresde no es necesario contrarrestar la guerra con el 'Cant dels ocells'.Toda la ciudad es un testimonio constante de memoria y de apelación a la paz por encima de todo
‘¿Y ahora por qué me enfado?Si es así como va el mundo’.Gran verdad, aunque ni la misma Mariscala en versión oficial o privada pueda estar siempre a la altura de la misma.'Der Rosenkavalier,' es el nostálgico rococó desengañado de esos dos gigantes de la lírica que lo volverán a repetir en 'Arabella'.
Las dos Condesas fueron, de lejos, lo mejor de ambos repartos y tal vez sólo en ellas se vivió totalmente esa angustia existencial helada de querer vivir sin saber por ni para qué y estar aterrado ante la idea de la muerte que al final se lleva a los tres personajes centrales.
El director bielorruso Dmitry Matvienko ha sido el ganador de la presente edición del Premio Malko para Jóvenes Directores de Orquesta, que se ha celebrado en Copenhague del 7 al 12 de junio.El segundo premio correspondió a Linhan Cui y el tercer premio fue para Chloé Dufresne
Barrie Kosky identifica la fuerza del cronos y el eros que anima a «El caballero de la Rosa» con la «Metamorfosis» de Ovidio: el paso del tiempo no es sino una expresión de una transformación constante y radical.