Esta regie de Bieito, actuada contra el fondo de un claustrofóbico cuadro escénico de muros de cemento, iluminó todos los personajes con una psicología a la vez implacable y conmovedora
Estupenda la puesta en escena de Robert Carsen, sintética pero perfecta en su concepción del drama rural de Gabriela Preissová.El público del Maestranza entró al juego con una de las más atronadoras ovaciones, agradeciendo la inclusión de un título que hasta este 2023 no se había visto en Sevilla
Fue durante el exigente 'Diario de un desaparecido' de Janáček cuando el tenor Nicky Spence mostró todo su potencial como solista a nivel internacional.Su voz sonó compacta, apasionada, resistente y sin ápice de cansancio durante los casi 40 minutos que dura todo el ciclo.
La sobriedad de la escena en esta producción permite una mayor concentración en lo propiamente musical y en la acción dramática, especialmente en los movimientos escénicos y en la psicología de los personajes.
La única deficiencia de esta excelente 'Katia Kabanova' fue la inmensidad de la Felsenreitschule, pero Kosky se las arregló con la ayuda de su descomunal talento teatral: los personajes fueron despegándose de un multitudinario muro humano para dar la cara al público, e interpretar sus ilusiones y mezquindades antes de volver a perderse en medio de este pueblo anónimo y cruel
Toda la obra gira alrededor uno de esos grandes antihéroes operísticos que irrumpen en nuestra vida de vez en cuando.El señor Brouček es un praguense que, como Falstaff o Zsupán, piden poco para vivir.
Destacó la interpretación de los inigualables momentos corales presentes durante toda la ópera de Martinů, a cargo de tres grupos corales totalmente coordinados y responsables de sonoridades realmente compactas, con una brillante apoteosis en el último acto antes de eliminar toda la tensión acumulada mediante un meditativo epílogo final.
El relato de Tatjana Gürbaca es inobjetable incluso en estos tiempos de guerra;nada de visiones románticas.Todo lo contrario.Lo que se retrata en este espacio escénico es ante todo un drama familiar intemporal y no local.
En esta Katia 'Kabanova' la distancia entre los personajes desemboca en una falta de tensión agravada por el sanitizado minimalismo surrealista de la escenografía.Tanto en esta como en otras obras suyas Janáček pide un verismo pucciniano en su inmediatez y no una colección de alegorías.