Los Niños cantores de la Abadía de San Florián, dirigidos por Markus Stumpner, se encuentran en una gira, titulada Happy Birthday Anton!, por varias ciudades alemanas y austríacas, antes de viajar a Roma en noviembre próximo.
En el Brucknerfest de Linz de este año se presentará una selección de los coros masculinos.Casi todas ellos están impresos en el volumen XXIII/2, publicado por primera vez en 2001 por Angela Pachovsky y Anton Reinthaler en la Critical Complete Edition.
Linz era ya en el siglo XIX la ciudad más poblada de Alta Austria después de Steyr.La pequeña urbe burguesa y agrícola se había convertido poco a poco en un centro de comercio e industria.La vida cultural de la ciudad se caracterizaba por una clase media en ascenso, así como por la aristocracia y el clero.
La Biblioteca Nacional de Austria ofrece en su regia Prunksaal (Sala de Estado) una extraordinaria exposición titulada “Anton Bruckner.Der fromme Revolutionär“ (Anton Bruckner, el revolucionario piadoso).
Las tres compositoras de este disco se inspiraron en Beethoven no sólo musicalmente, sino también como modelo de compositor revolucionario, invirtiendo así los roles habituales: el hombre no es el creador y la mujer la musa, sino a la inversa, ellas quienes se inspiran en él
Para el Teatro Colón parece que no existen más que cuatro óperas de Giacomo Puccini: 'Madama Butterfly', 'Tosca', 'La Boheme', y la póstuma 'Turandot'.Hace más de veinte años que no se programan 'La Fanciulla del West' y 'Manon Lescaut';
Esta regie de Bieito, actuada contra el fondo de un claustrofóbico cuadro escénico de muros de cemento, iluminó todos los personajes con una psicología a la vez implacable y conmovedora
Con motivo de celebrarse el 1300º aniversario de la abadía benedictina de la isla de Reichenau, en el lago de Constanza, la Dra Kinkel ha coeditado una recopilación de relatos titulada Reichenau, Insel der Geheimnisse (Reichenau, isla de los secretos), publicada por la editorial Bonifatius, de Paderborn.
With a first-rate cast and the transcendent refinement of Christian Thielemann’s musical direction, the new Bösch's production offered a fittingly grand tribute to Strauss and von Hofmannsthal’s greatest achievement