O mais interessante da vida artística de Ulibarri tem sido a formação duma orquestra de cordofones com mulheres, que era apresentada como “rondalla” feminina.
En los últimos años los conciertos con música cinematográfica se han multiplicado en nuestro país atrayendo a audiencias de todas las edades y trasfondos culturales, y se han convertido en un fenómeno de gran interés y un caladero de público muy rentable para determinadas iniciativas comerciales
La historia no transcurre en Venecia, sino en un "Ristorante di Venezia", que quizá se encuentre en algún lugar de Gelsenkirchen.Como "dato curioso", durante la obertura el sistema de sobretítulos anuncia que en Gelsenkirchen hay incluso más puentes que en la ciudad de la laguna.
Miki llega a la conclusión de que friki come friki: vuelcan sus frustraciones contra el que es más débil, sea en otro friki, en los homosexuales (las lesbianas no;siempre que estén cañón, les gustan), en las mujeres o en las personas trans, y otros.
En la década de 1950 Jasper Johns revolucionó la pintura con sus cuadros de la bandera estadounidense y de dianas.Sus obras se convirtieron en precursoras del arte pop.Mucho menos conocida es su actividad como coleccionista, especialmente de dibujos.
Desde 1995 los fondos del Festival Enescu se han ido incrementado tanto con patrocinios institucionales como con mecenazgos privados, y con ello el número y calidad de los conciertos presentados.Actualmente el Festival Enescu aspira a competir en la misma liga de los festivales de Lucerna, Edimburgo o Proms londinenses
Los grandes nombres de la dirección, la escenografía, el canto y el baile conforman un panorama en el que se combina la tradición con las nuevas propuestas.
La caída del régimen de Putin ha comenzado con esta guerra.Putin ha atado su destino a esta conflagración y no puede ponerle fin, aceptando una derrota.Solo puede confiar en una cosa.Su lugar destacado en la historia está ya asegurado: como el gobernante más sanguinario de Rusia desde Iosif Stalin.
La excusa del viaje realizado por Ravel a EEUU en 1928 -en el trasatlántico Paris- y otros viajes de compositores e intérpretes de los años 1920, le permite plantear a Anne-Sophie Bertrand un repertorio de una de sus épocas favoritas, los años de entreguerras (1918-39).
Si Boulez pasó tantos años dirigiendo las grandes obras románticas de Wagner, Brahms, Mahler, y Ravel, haciendo que sonasen racionales, frías y controladas, eso fue, tal vez, su forma de retornar al centro del timón del arte que amaba –música tonal grande y descriptiva-, sin necesidad de componer una sola nota de ella, al contrario que Schoenberg, Korngold, Shostakovich, Hindemith y Britten, que tuvieron el valor suficiente para hacer precisamente eso.