Los responsables musicales y técnicos ofrecieron un espectáculo muy acertado en su conjunto, que mereció la aprobación del público.El nivel vocal de la función fue correcto, sin que nadie desentonara, como ya nos tienen acostumbrados los de Sabadell
Além de partituras antigas em perfeito estado e uma boa coleção de música religiosa, o fundo musical do Seminário Maior oferece pistas para o estudo das mulheres intérpretes de música em Compostela.
La importancia de José Granero en la historia de la danza española radica en que era un gran dramaturgo capaz de contar historias y de transmitir emociones según las convenciones teatrales.Su lenguaje y sus códigos eran los coreográficos, que dominaba en alto grado que jamás tuvo que supeditar la teatralidad a la danza.
La hipnótica y envolvente música de Cererols ve anulado su carácter ceremonial, y sobre todo su profundidad espiritual, con el reflejo prosaico y hasta burdo de ciertas situaciones presentadas, como asociar el Agnus Dei a la prenda de borrego blanco en que se enfunda la performer femenina, también en otro momento repartidora de Glovo.
Las películas de Andréi Tarkovski, ejemplo arquetípico de construcción palimpsestial e interdisciplinaria en el séptimo arte, han escuchado siempre de forma atenta a la música en su búsqueda de elementos que apuntalaran el desarrollo de una obra cinematográfica única en el siglo XX.
"Hay que buscar una renovación en el público porque mucha gente se olvida que en algún momento también fue joven y tuvo el impacto de escuchar por primera vez una voz educada.El público amante de la ópera está ahí, y va a estar siempre, difícilmente se irá.
La producción de Hilsdorf tiene mucha energía, magia y simbología, y con su emocionante enfoque muestra cómo es posible lograr una maravillosa puesta del oratorio de Scarlatti.Su versión es directa, Dios y el Diablo aparecen personalmente en la trama y no solo sus voces como prevé el libreto (Voce die Dio;
Se puede decir que el ballet El cascanueces, con música de Piotr Chaikovski, tuvo ya desde un comienzo visos de haber sido engendrado en un mundo de fábula, de príncipes y de palacios de ensueño En diciembre de 1816, exactamente el viernes 6 de diciembre, día de San Nicolás (obispo de Mira, Licia, Imperio Bizantino, en el 310;
Isabel Palacios considera que su función como músico es disfrutar en la audición de la música que sus amigos hacen llegar a sus manos para la diversión y gusto de todos los que aman la música del Pasado de América, creándose por lo mismo un universo paralelo tramado en el sueño compartido por los artistas, escritores, poetas, instrumentistas y musicólogos que unidos así reviven la inmaterial riqueza sonora de la Antigüedad, tal y como lo hacían las contemplativas Academias de Arte en el Renacimiento.