En la tercera jornada del congreso dedicado a Sebastián de Vivanco las sesiones matinales se centraron en los compositores contemporáneos de Vivanco, presentándose algunos proyectos colectivos de gran interés.
No puede decirse que la próxima temporada de la Sinfónica de Bilbao no asuma riesgos, porque asume el riesgo más grande: querer tocar muchos palos, como si quisiera convocar de esa manera no solo a un perfil de público, el de unos aficionados que en la temporada en curso le han sido esquivos, sino a una base social más amplia que pueda sentirse atraída por señuelos no tradicionales o exclusivamente musicales, como ejemplifican el arrebato cinéfilo de ofrecer con proyección y diálogos el filme West Side Story o rememorar los cincuenta años de la odisea espacial de Stanley Kubrick, guiños pop en el seno de una temporada muy ecléctica y que encontrará su justificación si el público, cartas en mano, se anima y hace juego.