Los grandes nombres de la dirección, la escenografía, el canto y el baile conforman un panorama en el que se combina la tradición con las nuevas propuestas.
La nueva producción -¿era realmente necesaria?- de Kokkos fue víctima del fuego cruzado de tradicionalistas y progresistas.En mi país natal decimos ‘no hay que gastar pólvora en chimangos’, o sea que no da como para una discusión de envergadura ni siquiera para protestarla.
Cristalino y con gran aliento en el arco, Emmanuel Tieknavorian ofreció una interpretación llena de ingenio, delicadeza y ternura con su Stradivarius (Cremona 1698) del primer concierto de Prokofiev.
Chailly ha impuesto una visión que parecía rehuir deliberadamente la espectacularidad en sí para insinuar un tono sombrío de sospecha, terror de todo tipo que se acentuaba por la presencia del fantasma del zarévich asesinado -francamente algo excesiva- al que obviamente sólo ve el mandante supuesto de su degüello
El manejo de clímax y dinámicas fue modélico por parte de Peter Flor, cuyo impulsivo dinamismo corporal sobre el podio en los instantes trágicos de la condena eterna fue clave para inyectar tensión dramática durante toda la 'secuencia' del Requiem
Chailly comenzó creando el impactante clima con el delicado y muy estirado pedal en pianissimo que llevó a adentrarnos en la naturaleza gracias a las sonoras intervenciones de cada atril, -incluidas las tres trompetas fuera de escenario- con su tema principal plácidamente cantado por la cuerda que condujo a un rotundo clímax.
No le bastó a Verdi (y otros) con sufrir en vida censura en sus libretos y tener que tragar.Después tuvimos la plaga de los directores de escena que modifican las palabras para que sus originalidades no resulten tan burdas.
Ibermúsica presenta su temporada 2022/2023 con 24 conciertos excepcionales y orquestas de tres continentes, entre ellas la Royal Concertgebouw, lFilarmónica de Berlín, Filarmónica de Múnich, Symphonieorchester des Bayerischen Rundfunks, Philharmonia y London Philharmonic Orchestra, St.