Jonathan Fournel es un joven poeta soberano del piano y formidable técnico del teclado, con una reserva de potencia que puede rozar la ferocidad en los fortissimos, sumada a un generoso uso del pedal, al arte de dosificar ritmos y colores, así como al dominio del rubato, y a la preocupación por la claridad de las líneas, incluso en los pasajes más bulliciosos.
Gracias al citado poder de evocación de Les Siècles y de su François-Xavier Roth, disfrutamos de maravillosas coreografías como se disfruta de escenas maravillosas cuando se lee un libro
La versión de Batiashvili del Concierto de Szymanowski salió más que convincente: su Guarneri suena grande, su técnica es asombrosa y su concepto ofrece coherencia con todos los contrastes que encierra esta obra, tocada con absoluta libertad y con toda la atención por parte de la batuta.
El 29 de marzo, coincidiendo con el segundo aniversario de su fallecimiento el 29 de marzo de 2020, se ha celebrado en Cracovia el funeral de estado en memoria de Krzysztof Penderecki.
El núcleo lo constituye un ciclo sinfónico-coral orgánico, fresco y versátil, con 14 conciertos en el Auditorio Nacional de Música, de los que 10 estarán interpretados por la ORCAM.
La violinista española María Dueñas ha obtenido el primer premio en la Menuhin Competition 2021.El segundo premio fue para el alemán Simon Zhu, el tercer premio para la norteamericana Hana Chang, y el cuarto premio para la estadounidense Karisa Chiu.
El chasco del libro consiste en que nos quedamos sin saber cuáles son esas “nuevas aventuras”, tras afirmar aquello del equilibrio entre el individuo y la sociedad, Kenyon no presenta ninguna propuesta sobre quién y cómo ha de producir música, ni dónde ni –sobre todo- ante quién se va a interpretar.
Cambiar nuestras vidas, transformar nuestra sociedad, y hacerlo desde y con la música, incluso en tiempos de confinamiento.Si Gabriel García Márquez tituló a su novela del año 1985 El amor en los tiempos del cólera;
Fue un comienzo exigente para la OSCyL y Gourlay, que mostraron buena implicación, pero realmente el programa de esta velada dio poco pie al relax.Quizá el público pudo disfrutar de una forma distinta con el Concierto para violín n.º 1 de Karol Szymanowski, ante todo porque el protagonista, Roberto González-Monjas, bordó una interpretación repleta de plasticidad y precisión