Adentrarse en Artifact II, de William Forsythe, es como ingresar en un ballet de cuento de hadas;uno poblado de personajes misteriosos, texto enigmático, danza clásica de gran belleza y una panoplia de recursos teatrales, como un telón que cae repetidamente durante un doble pas de deux con la Chacona en re menor de Johann Sebastian Bach.
Hay que estar dispuesto a ver lo que está delante de uno y ver la chance que uno tiene.A veces hay gente está tan ocupada consigo mismo o con una negatividad que no es capaz de ver lo que tiene delante.
'Coppelia x Machina' pone el dedo en la llaga en controvertidas cuestiones de suma actualidad: ¿Qué puede ocurrir cuando desaparezcan las fronteras entre el ser humano, la marioneta y la máquina?
Inspirada hasta en el más mínimo detalle, la compañía del Ballett am Rhein (Düsseldorf / Duisburgo) ha producido una joya que en estos tiempos anuncia la inminente llegada de la fiesta del amor.El resultado es una obra cautivadora, liberadora, muy fluída en el relato y con una exquisita atmósfera íntima, familiar.
El poder y la ambición de coleccionar tretas innovadores existen en todas partes, dentro y fuera de las nobles salas de ballet, como muy bien lo sabe Demis Volpi por vivencias propias.El final de su ballet es sorprendente y cinematográfico, todo un acierto y deja boquiabiertos a los espectadores.
Sus semblantes, aunque blancos como la nieve, son juvenilmente hermosos, ríen tan inquietantemente alegres, tan inquietantemente amables, asienten tan misteriosamente lujuriosos, tan prometedores, estas bacantes muertas son irresistibles.
La pequeña cerillera es una historia muy dura, sumamente triste, como casi todas las de Andersen, marcado psíquicamente por la miseria en su propia infancia.La bailarina Rose Nougué-Cazenave encarna maraviollosamente a la desvalida niña que morirá de frío en la calle durante aquella gélida noche de Año Nuevo, después de tratar en vano de vender cerillas a los que pasaban por el lugar.
Volpi y su compañía han alcanzado con su sobresaliente técnica altos niveles de calidad y virtuosismo, con un lenguaje muy dinámico, fresco y lúdico que los sitúan entre los grupos más creativos de danza moderna y neoclásica internacional.
La tesitura funciona a las mil maravillas y despierta miles de metáforas asociativas.Hay mucho movimiento, mucha audacia, mucha variedad, pluralidad de enfoques, con un entramado unificador deslumbrante en esta exhibición de virtuosismo danzístico moderno.